Las obras consistieron en la urbanización de la parcela de acceso a la central eléctrica de Moralets, actuando también en la conexión con la carretera de acceso mediante la construcción de una rotonda.
La parcela se dotó de un puesto de control de accesos, zona de aparcamientos, oficinas y viales en aglomerado para el tránsito de los vehículos. Dentro de la parcela urbanizada se llevo a cabo la construcción de una nave-almacén con puente grúa, destinada para el almacenamiento de materiales y productos de 1.050 m2 de superficie. Dicha nave se conforma mediante acero laminado en estructura, con cerramiento de bloque y cubierta de correas de acero galvanizado y panel sándwich. También se realizo la instalación eléctrica de la nave, así como la carpintería metálica en puertas y ventanas.
En la zona de aparcamiento exterior se instalaron marquesinas de acero laminado con cubiertas de chapa grecada de 6 mm de espesor, así como la iluminación pertinente, previa colocación de canalizaciones soterradas para tal fin. En total se instalaron 80 plazas de aparcamiento.
Finalmente se realizo un vallado perimetral de la parcela sobre un zócalo de hormigón y se colocaron dos puertas de acceso motorizadas en el puesto de control y entrada a las instalaciones.